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Reseña del libro El multimillonario y la virgen de AKASH HOSSAIN
La sinopsis de El multimillonario y la virgen de AKASH HOSSAIN
El multimillonario y la virgen de AKASH HOSSAIN pdfEl multimillonario y la virgen de AKASH HOSSAIN pdf descargar gratis leer onlineDahlia ha sido mía desde que la vi. Mi muñeca.
Abrió la boca para susurrar algopero la detengo tomando sus labios para darle el beso que he estado esperando toda la semana. Le rodeo la cintura con una mano y la agarro por la espalda mientras mi lengua separa sus labios. Se amolda a mi pecho tanto como puede con sus ataduras, cediendo a cada movimiento de mi lengua mientras exploro cada contorno de su boca. Saborearla por primera vez es más intenso de lo que esperaba. Quiero cubrir cada centímetro de su cuerpo con el mío y empalarla con fuerza sin retener nada.Profundizando en el beso, sostengo mi peso con un brazo y me estiro junto a ella. Ella no puede girarse para mirarme, pero hace lo que puede con sus piernas, deslizando una de ellas hacia arriba y hacia abajo entre mi tobillo y la pantorrilla a través de mis pantalones. Tengo que apartarme para no acabar arrancándome la ropa y enterrando mi polla en lo más profundo de ella. Tenemos toda la noche por delante, así que pienso ir a mi ritmo y saborear cada centímetro de ella antes de follarla con fuerza.Me separo de nuestro beso y sonrío cuando ella toma aire y me pasa la lengua por las nalgas.y sonríe cuando toma aire y me pasa la lengua por el labio inferior, deseosa de continuar. Estoy igual de dispuesto a devorar esos labios de nuevo. Me levanto de la cama y me sitúo entre sus rodillas, abriéndolas para dejar espacio mientras entierro mis manos en su larga cabellera negra y levanto la cabeza bruscamente, aplastando mi boca sobre sus labios.Sus pies se deslizan por la cama y presiona sus muslos contra la parte exterior de mis piernas. El calor irradia desde su centro y, en un instante, se me pone dura como una piedra. Agarrando su espalda con una mano, bajo mi torso y mis caderas hacia su cuerpo, dejando que todo mi peso descanse sobre ella mientras aprieto mi polla en su coño apenas legal, separado solo por mis bóxers y mis pantalones.Dahlia apenas respira, sobreviviendo con la bocanada de aire que compartimos, y logra un gemido que suena como palabras. Quiero ahogar el sonido, para que el beso continúe, pero ella repite las palabras.